En la edición digital del diario El País puede leerse hoy un artículo firmado conjuntamente por cuatro de los mayores expertos mundiales en la Guerra Civil española y sus consecuencias. Uno de ellos, José Luis Ledesma, es profesor de la Universidad de Zaragoza y colaborador habitual de El Agitador al tiempo que gran conocedor de la historia reciente de Caspe, ciudad con la que mantiene estrechos lazos afectivos. Los otros tres son Paul Preston (Catedrático de Historia Contemporanea en la London School of Economics y autor de, entre otras obras, El Holocausto Español) Ángel Viñas (Catedrático de Economía Aplicada en la UNED, diplomático e historiador, autor de una vasta bibliografía en torno a la Segunda República y en especial sobre la implicación de las potencias internacionales en el decurso del conflicto) y Fernando Hernández Sánchez (Profesor de la Universidad Autonoma de Madrid)
El referido artículo, titulado «Puntualizaciones sobre Paracuellos» viene a aportar luz a uno de los hechos más controvertidos de la Guerra Civil y que más debate sigue generando. A propósito de la muerte reciente del histórico líder comunista Santiago Carrillo, algunos medios y algunas plumas se han apresurado a cebarse en su presunta implicación en la matanza de Paracuellos del Jarama para desvirtuar el recuerdo de su enorme, aunque obviamente discutible, figura pública. Los cuatro autores del artículo vienen a poner luz al respecto aportando datos contundentes que solo quienes encaran la investigación histórica con el debido rigor y dedicación pueden manejar. Queda demostrado el origen de la versión que atribuye a Carrillo la autoría de las matanzas y también el contexto político que dio lugar a ella.
Desde El Agitador, creemos conveniente hacernos eco de esta noticia en la que participa directamente uno de nuestros colaboradores manifestando el orgullo que nos reporta contar con su ciencia y su amistad. Por otra parte, opinamos que esta es la mejor manera de cumplir con uno de nuestros principios fundacionales: aportar coherencia y rigor a cualquier debate ciudadano. El tratamiento dado a la noticia de la muerte de Santiago Carrillo en otro medio local nos ha producido algo muy parecido a la vergüenza tanto por la pobreza argumental como por la, por otra parte demasiado habitual en dicho medio, deficiente redacción y presentación formal. Se puede pensar y opinar lo que se quiera sobre cualquier cosa pero siempre hay que mostrar respeto por el lector. Dicho en román paladino: hay que currarse un poquito más las cosas, especialmente cuando aspiras a que te lean los demás.
Les dejamos con un trabajo excelente. Luego, opinen ustedes lo que quieran.
http://elpais.com/elpais/2012/05/14/opinion/1336994556_676295.html
