En los últimos días hemos recibido en la redacción de El Agitador varias fotografías que muy amablemente nos han hecho llegar algunos de nuestros lectores. Todas ellas han sido tomadas de noche desde lugares distintos de nuestra localidad. En todas ellas puede percibirse la presencia de dos misteriosos brazos de neón azulado elevándose hacia el firmamento estrellado. Ninguna de las fotografías posee la nitidez suficiente como para poder aventurar, basándonos únicamente en lo que en ellas se muestra, una hipótesis medianamente fiable acerca de la naturaleza de esas misteriosas extremidades azuladas.
La coincidencia en el tiempo con Expocaspe podría servir para improvisar una explicación fácilmente ubicable dentro de esos estrechos margenes de lo racional que, sin duda, satisfarían a muchos de nuestros lectores. Nuestra experiencia, por contra, nos dice que nunca las cosas son lo que parecen ser. Podríamos haber desechado la publicación de estas inquietantes imágenes aceptando que eran tan solo el reflejo lejano de las luces de una atracción de feria, pero eso sería tanto como ser infieles al espíritu fundacional de El Agitador. Para nosotros es bastante evidente que nos hallamos ante un caso claro de avistamiento OVNI. Quizá el más claro que hasta el momento se haya producido en el Bajo Aragón. No nos cabe la menor duda. Y para eso están estos impactantes testimonios gráficos.
