Hace siglos, los reyes inspiraban pleitesía reverencial y terror, porque un solo gesto suyo podía acarrear crueles castigos. Después, cuando los revolucionarios franceses mostraron que no eran enviados de la Providencia y que sus blancos cuellos eran vulnerables al filo de la guillotina, todo comenzó a tambalearse. El miedo se diluyó, se hicieron humanos, comenzaron a lucir un particular empeño en perpetuar sus reales asientos en el trono al precio de ligar su destino a los valores y regímenes más conservadores, y cada vez más pueblos y sectores sociales dejaron de reconocer su divina misión. Hasta a la vieja España llegaron los vientos antimonárquicos cuando, en 1931, el penúltimo Borbón tenía que abandonar un país que ni siquiera lo expulsaba por las armas, sino por las urnas y en medio de una fiesta popular.

Ni sumisión, ni temor ni apenas contestación. Lo que genera ahora la monarquía es un difuso respeto e incluso indiferencia. Aunque a sus ancestros les resultaría una triste claudicación, aparecer más en la prensa del corazón que en la política era quizá la única forma de mantener la corona sobre la testa. Pero la historia da giros inesperados. Los réditos del aún confuso 23-F de 1981 no serán eternos, sobre todo para quienes eso fue en tiempos de Maricastaña. Y las penurias económicas, otra vez la crisis, rebajan las aguantaderas de la gente. Quizá podía obviarse que la más alta magistratura del Estado quedara al margen de principios básicos de la democracia como la responsabilidad jurídica y el carácter electivo. Pero en tiempos de ajustes draconianos algunos se preguntarán por el sentido de una poco barata institución, y bastantes más fruncen el ceño si un yerno ducal se ve envuelto en turbios manejos con don Dinero. Después de todo, quizá no fuera tan mala la idea del Rey de llevar gafas de sol. Unas gafas gruesas para no ver ni ser visto, o incluso unos tapones en los oídos para no oír la que está cayendo y que les salpica también a ellos.

José Luis Ledesma

Entradas relacionadas

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies